“¡Me caso!”. Prometidos y prometidas, el que no haya dicho esta expresión tras la pedida de mano, que tire la primera piedra. ¿Nadie en la sala, verdad? Aún así, la frase suele ir acompañada de una pregunta más difícil de responder. ¿Cómo preparar una boda? ¿Por dónde empiezo? Te lo contamos todo para que tu recorrido hasta el altar no se convierta en un calvario. Y recuerda que puedes estudiar nuestro curso online de wedding planner y aprender a organizar este tipo de eventos de manera profesional.
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¡Me caso! ¿Por dónde empiezo?
Además de llamar rápidamente a nuestros familiares y amigos más cercanos para comunicarnos la famosa frase “me caso”, el recién prometido o prometida debe ponerse manos a la obra con la preparación de la boda.
Una de las primeras fases que se deben encarar es el hecho del presupuesto. Mientras que algunas parejas parten del ¡sí, quiero! con un monto acumulado, otras deben partir desde cero. Si este segundo es tu caso, deberás tener en cuenta algunos consejos para que tu boda sea más barata.
Ahorrar para mi boda: consejos y trucos
A la hora de planificar tu boda, ten en cuenta los siguientes puntos. Con las decisiones que tomes en estos ámbitos, podrás recortar el presupuesto de tu boda.
Los invitados importantes
Generalmente, pensamos en los invitados de una boda como una gran lista de personas que alguna vez han tenido relación con uno de los dos prometidos. Sin embargo, intenta evitar invitar por compromiso. Cierra la lista de invitados cuando los amigos y familiares más cercanos se acaben.
Mesas más largas
Tenemos tendencia a querer que las mesas de nuestra ceremonia estén distribuidas de manera que todos los invitados de un asiento cuadren con sus compañeros. Sin embargo, ¿porqué no pensáis en configurar mesas más largas y variadas? “Mezclar” personas de diferentes ámbitos puede generar un ambiente agradable y entretenido, alejado de ese aburrido momento en el que se acaba la conversación.
Mismos proveedores
Algunas empresas ofrecen ya un abanico de servicios relacionados con las bodas en un precio cerrado. Busca una empresa de catering que alquile mesas, barras libres y decoración. Este punto es uno de los más interesantes si tu idea es contar con un wedding planner. Estos profesionales se encargan de encontrar los distribuidores más acertados para cada ceremonia. Por ello, si quieres recortar en tus gastos, pídele a este profesional que busque una empresa que pueda realizar varias tareas a la vez.
Espera a rebajas
Tras un ‘me caso’, empieza la planificación de la boda. Un punto imprescindible en el que debes reparar es en las rebajas. Si no tienes ningún periodo de estos cercanos, piensa en los días puntuales como el Black Friday u otras ofertas del estilo. También debes tener en cuenta la temporalidad de los productos que quieras. Por ejemplo, en tu decoración floral, ten en cuenta qué plantas pueden salirte más baratas por ser de temporada.
Calendario en mano
Durante la organización de tu boda deberás tener siempre a mano un calendario. Y es que las decisiones que debes tomar deben tener un día fijado cuanto antes. Tras tu ‘me caso’, empezad a buscar una fecha. Para ello, deberéis tener en cuenta también qué época del año preferís para vuestro enlace matrimonial. Asimismo, tened en cuenta los precios por temporada y los precios por día de la semana. Si tenéis un presupuesto ajustado, elegir un día entre semana es vuestra mejor opción. ¿Habéis pensado en un viernes, por ejemplo?
Tras haber elegido y cerrado vuestro día especial, deberéis poneros límites en cuanto a tiempo para tomar otras decisiones. Por ejemplo: ¿Cuánto tiempo tenemos para elegir restaurante? ¿Con cuánto tiempo de antelación debemos avisar a nuestra lista de invitados? ¿En qué momento tenemos que empezar a pensar en nuestra luna de miel?
Otros puntos a prever en tu boda
También deberás prever otros puntos. Algunos de ellos determinarán el estilo de tu boda y el presupuesto final variará dependiendo de vuestra decisión.
- Detalles para los invitados. Podéis optar por tener detalles personalizados o, por lo contrario, hacerlos por familias. Asimismo, también podéis tener en cuenta las opciones que aúnan el detalle para el invitado y la diversión durante el evento. Un claro ejemplo de este punto es el ya famoso photocall. Con esta idea opción aseguras momentos de diversión y, a la vez, detalles para todos los invitados.
- Traje y accesorios. ¿La novia llevará el traje de boda durante la ceremonia y tras ella se cambiará? ¿Usará un vestido para bailar toda la noche? Determinad todos estos detalles tanto para la novia como para el novio. El presupuesto de este apartado puede hacer variar con creces el presupuesto total de una boda. Por ello, es importante que tengáis una previsión exacta de los cambios de vestuario y accesorios que van a hacer los novios.
- Tipo de banquete. Obviamente, existen diferentes tipos de banquetes para bodas. Algunos se preparan en el mismo lugar que la ceremonia (si se trata de un matrimonio civil), otros requieren de desplazamiento, unos tienen picoteo al principio, otros no… ¿Cuál se ajusta más a vuestra idea de boda? ¿Preferís centrar la fiesta en la comida o, por lo contrario, dejar la comida como algo secundario y centrar vuestra ceremonia en la diversión?
- Fotografía y vídeo. Cuantos más accesorios contratéis para vuestros recuerdos audiovisuales de la boda, más va a subir el precio total de este apartado. Por ello, podéis optar por las versiones más sencillas de vídeo y fotografía de boda. También podéis optar por contratar a una persona “amateur” en este sector.