Hacerse la manicura y embellecer las manos cada vez está más demandado, por lo que no son pocas las personas que se preguntan qué son las uñas acrílicas. Y es que hay muchas formas distintas de emplear las uñas artificiales y postizas, y cada una de ellas tiene sus propias particularidades y características. Por eso, hoy queremos profundizar en el uso de las uñas acrílicas: materiales, diferencia con otras manicuras, cómo cuidarlos y mucho más. ¡Quédate con nosotros para descubrir todo lo que necesitas para hacer uñas acrílicas!
Índice de contenidos
¿Qué son las uñas acrílicas y para qué sirven?
Las uñas acrílicas son extensiones artificiales que se colocan en las uñas para darle un aspecto más estilizado de manera natural. Se trata de una manicura que debe hacer alguien con experiencia, por lo que no es recomendable hacerlo de manera autodidacta en casa, algo que sí puede hacerse con otras uñas. Para que los resultados sean buenos, no dañen la piel ni las uñas y sean duraderos, hay que recurrir a una manicurista experta en sistema acrílico.
Las uñas acrílicas duran entre seis y ocho semanas, en función de los cuidados que se apliquen. A medida que la uña vaya creciendo, será necesario aplicar un relleno más o menos cada dos o tres semanas, según cada caso.
Además, este tipo de uñas tiene múltiples beneficios. Sirven para:
- Mejorar el aspecto de las uñas quebradizas y mordidas.
- Crean una barrera protectora en las uñas naturales.
- Se retoca poco en comparación con otras manicuras.
- La dureza del acrílico lo convierte en un material perfecto para uñas quebradizas.
- Se le puede dar la forma, el tamaño y la longitud que se quiera.
Pero, ¿en qué consiste esta manicura? Los materiales para uñas acrílicas están hechos de una mezcla de polvo acrílico y líquido. Cuando se combinan, forman una pasta que se aplica en las uñas naturales con una plantilla y se les da la forma deseada. Por lo tanto, lo que necesitas para hacer uñas acrílicas es la mezcla, un molde o tip plástico y los conocimientos expertos para aplicar esta manicura. Recuerda: ¡no es apta para principiantes!
Diferencia entre uñas de gel y acrílico
La principal diferencia entre las uñas de gel y acrílico es la dureza del material. Mientras que las primeras son más blandas y sólo permiten alargar un poco la uña natural, cuando se emplean uñas acrílicas se pueden hacer extensiones de mayor longitud debido a la dureza del material, que permitirá aguantar otros usos sin romperse.
Entonces, ¿qué es mejor, uñas de gel o acrílicas? Depende de cada caso. Aunque las uñas acrílicas son más duras y permiten aguantar más el trabajo diario, las uñas de gel se aplican con un único producto, no tienen olor y el resultado es más natural y flexible, según muchos expertos. Tienes que encontrar el que encaja mejor contigo.
Diferencia entre uñas de gel y porcelana
También cabe comprender la diferencia entre uñas de gel y porcelana. Este segundo material es muy duro y resistente, por lo que dura más. De hecho, según cuál sea el nivel de cuidado de las uñas, estas pueden llegar hasta un mes. Otra diferencia entre las uñas de gel y las uñas de porcelana es la textura.
Finalmente, las uñas de porcelana deben utilizar un mantenimiento más exhaustivo en comparación con las de gel, por lo que si no buscas estar pendiente constantemente de la manicura, puede que sea mejor otra opción.
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Cómo aprender a poner uñas acrílicas paso a paso
Estos son los 8 pasos para aprender a poner uñas acrílicas que debes conocer:
- Escoge las uñas del tamaño indicado. Las extensiones deben adaptarse al tamaño de la uña natural.
- Prepara la uña natural. Antes de poner el acrílico, limpia, lima y desinfecta la uña natural para garantizar su bienestar.
- Coloca el molde. Una vez las uñas ya están cortas y bien redondeadas, se coloca el molde o tip.
- Construye la uña. Coloca en el vasito un poco de monómero y en otro recipiente, el polímero.
- Sitúa el molde y aplica. Cuando el tip o molde ya está sobre la uña, se coloca la capa de primero, sin ácido, y se deja secar. Después, se moja la punta del pincel en el monómero, se escurre un poco haciendo presión ligera y se inserta el pincel en el polvo durante tres segundos hasta recoger una pequeña bola.
- Aplica la primera perla en la uña. Aplicamos la primera perla en el centro, en la llamada zona de tensión; dónde se unen el molde con la uña natural. Después, colocamos la segunda en la parte superior y la tercera, en el borde libre.
- Dale forma. Cuando el material ya se ha secado, procedemos a darle forma. Eliminamos las imperfecciones remanentes con una lima intentando que quede lo más natural posible y terminamos con una lima pulidora para hacer que la superficie quede lo más suave posible.
- Retira excesos y limpia. En el último paso, retiramos el exceso de polvo, limpiamos la superficie, lavamos las manos y aplicamos una capa de brillo.
Cómo cuidar las uñas acrílicas
Para cuidar las uñas acrílicas es necesario realizar un mantenimiento más o menos cada dos semanas, en función del ritmo de crecimiento de la uña. En este sentido, se aplica un relleno en la parte inferior para cubrir el espacio que aparece entre cutícula y el acrílico. Se hace en dos pasos:
- Retirar el esmalte y verificar que no hay desprendimiento de material.
- Colocar el material de nuevo en el área y continuar con los pasos anteriores.
Además, algunas recomendaciones y consejo para cuidar las uñas acrílicas incluyen utilizar guantes cuando se realizan tareas que pueden dañarlas, evitar el contacto con los productos químicos como la acetona, no morderse las uñas, evitar forzarlas, secar bien las manos para evitar la propagación de hongos y acudir a un profesional para retirarlas.
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¿Cómo retirar las uñas de acrílico?
Es importante no quitarse las uñas acrílicas sin un profesional. Este proceso puede ser delicado y debe estar supervisado por un manicurista experto, el cual utilizará una lima electrónica para eliminar la capa superior de brillo. Tras este primer paso, seguirá envolviendo una almohadilla de algodón empapada en acetona alrededor de cada uña y, después, envolverla con papel de aluminio para que esté en remojo entre diez y quince minutos. Finalmente, se retira el papel de aluminio, el algodón y se utiliza el empujador de cutículas para quitar el acrílico suelto suavemente.
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