El umami es el quinto sabor. Junto con el dulce, el ácido, el salado y el amargo, se considera una característica gustativa sabrosa y placentera. La descubrió el químico japonés Kikunae Ikeda en 1908 y se encuentra en muchos alimentos ricos en aminoácidos como el glutamato, y nucleótidos como el inosinato y el guanilato. Para comprender mejor cómo sentir este sabor, te traemos una lista de 10 alimentos umami que puedes incorporar a una dieta para hacerla sabrosa y destacar sus matices. ¡Vamos a ello!
Combinar sabores y ser ingenioso con los ingredientes aumenta la adherencia a la dieta. Diseña planes de alimentación deliciosos y aprende a incorporar todos los sabores efectivamente con el técnico experto en nutrición y dietética de Esneca.
Índice de contenidos
¿Cómo sentir el sabor umami?
Sentir el sabor umami es una experiencia sensorial que involucra receptores específicos en nuestras papilas gustativas. Estos receptores son especialmente sensibles al glutamato monosódico (MSG) y a ciertos nucleótidos presentes en muchos alimentos naturales y fermentados.
Algunas maneras de sentir el sabor umami en la dieta diaria son:
- Concentración y combinación de ingredientes. Los alimentos ricos en umami suelen ser más efectivos cuando se combinan entre sí. Por ejemplo, combinar tomates y queso parmesano en una pizza o en unos espaguetis permite realzar el umami en ambos ingredientes.
- Fermentación y maduración. Los alimentos fermentados como el miso, la salsa de soja y el queso parmesano tienen un alto contenido de compuestos umami debido al proceso de fermentación que descompone las proteínas en aminoácidos libres, lo que incluye el glutamato.
- Cocción lenta y caldos. Los caldos hechos a fuego lento, como el caldo de hueso dashi, extraen los compuestos umami de los ingredientes, ofreciendo un sabor profundo y complejo.
- Uso de potenciadores del sabor. Por ejemplo, ingredientes como la salsa de soja, la pasta de miso y el tomate concentrado pueden ser añadidos a los platos para incrementar el perfil umami.
Lista de 10 alimentos umami
La mezcla de sabores potencia la experiencia gastronómica. Y al conseguirlo, las personas que siguen una dieta sienten que no se hace tan duro, lo que aumenta su adherencia a la misma y mejora sus posibilidades de éxito. Y es que todas las dietas tienen el mismo problema: a veces, es muy difícil, monótono y duro. Conseguir que las comidas sean sabrosas y mezclar adecuadamente los ingredientes y sabores puede marcar la diferencia. ¡Acompáñanos para conocer estos 10 alimentos umami que puedes incorporar a un plan de alimentos!
Tomates
¡Son una excelente fuente de glutamato natural! Tanto si son frescos como si se consumen secos, los tomates tienen un alto contenido de umami. En particular, los tomates secos tienen una concentración de sabor mucho más intensa, motivo por el que son perfectos para incorporar a salsas, guisos y ensaladas.
Queso parmesano
Si algo caracteriza al queso parmesano es su intenso sabor, que se consigue a través del proceso de envejecimiento del parmesano. Este proceso descompone las proteínas en aminoácidos libres, incluyendo el glutamato. Rallar un poco de parmesano sobre pastas, risottos y ensaladas puede transformar el plato con su sabor umami característico.
Salsa de soja
Este pilar de la cocina asiática es un condimento fermentado altamente rico en sabor umami. Se utiliza para salsas, aderezos o sobre las comidas cocinadas, y añade una profundidad de sabor a cualquier plato que la incorpore. Eso sí: aunque es rica en sabor, es importante tener en cuenta que también tiene alto contenido en sodio, por lo que hay que utilizarla con moderación y preferiblemente baja en sal.
Setas shiitake
Tanto frescas como secas, las setas shiitake pueden añadir un sabor profundo a sopas, guisos, salteados y platos de arroz. Se trata de una excelente fuente de guanilato, uno de los nucleótidos que contribuyen a potenciar el sabor umami en cualquier comida.
Anchoas
Aunque son pequeñas y saladas, las anchoas están llenas de inosinato y glutamato. Es habitual encontrarlas en salsas como la pasta de anchoa, que puede incorporarse en pastas para darles un sabor único y umami. Además, también se incluyen en aderezos para salsas o como condimento en pizzas.
Alga kombu
El kombu es un tipo de alga marinada que se utiliza con frecuencia en la cocina japonesa para hacer dashi, un caldo fundamental rico en umami. El kombu es una de las fuentes más ricas de glutamato y se puede emplear tanto en caldos como en sopas o para envolver arroz en la preparación de sushi.
Carne de res
Especialmente cuando se cuece lentamente o se madura, la carne de res tiene un alto contenido de inosinato. Se puede utilizar en guisos, estofados y asados, que pueden beneficiarse de los compuestos umami naturales presentes en la carne de res, ofreciendo un sabor profundo y satisfactorio.
Huevos
Cocidos, revueltos, en omelettes o en sopas y ensaladas: no importa cómo se prefieran, en todas sus formas los huevos constituyen una fuente de umami de lo más versátil para incorporar a la dieta. Además, tienen un alto contenido proteico, ¡perfecto para añadir a un plan de alimentación equilibrado!
Miso
El miso es una pasta fermentada de soja que es fundamental en la cocina japonesa. Es rico en glutamato y puede utilizarse en sopas, adobos, salsas y como base para muchos platos. Su sabor umami es fuerte y distintivo, añadiendo profundidad a cualquier receta.
Mariscos
Los mariscos son ricos en inosinato. Algunos ejemplos son las vieiras, los camarones y los mejillones, por nombrar algunos. No solo son alimentos que aportan umami, sino que son una fuente excelente tanto de proteínas como de nutrientes esenciales. Se pueden preparar de muchas formas distintas: a la parrilla, en sopas, en paellas…
Introducir estos alimentos ricos en umami en una dieta puede transformar las comidas en experiencias más sabrosas y satisfactorias. Por ello, conocer todas las posibilidades es necesario para diseñar un plan de alimentación rico y variado.
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