Estamos convencidos de que habéis oído hablar del llamado “coach deportivo”. En el gimnasio, en el Instagram de algún/a influencer o en algún artículo de interés general. Lo cierto es que esta figura está ganando cada vez más popularidad, especialmente entre los aficionados y aficionadas al deporte y a las terapias alternativas. El coach deportivo dista relativamente de un entrenador personal convencional. Las diferencias radican en los aspectos del deporte que se trabajan, así como en la meta del entrenamiento. Hoy queremos explicaros más acerca de esta profesión. Y además, os recordamos que podéis ampliar vuestra formación en el sector con nuestro Curso de Coaching Deportivo y conoce todos los beneficios de esta disciplina.
Índice de contenidos
¿Qué es el coaching?
Para empezar, haremos una breve introducción sobre qué es el coaching para, posteriormente, introducirnos a la figura del coach deportivo.
El coaching es un proceso de aprendizaje y descubrimiento sobre nosotros mismos, mediante la exploración y aportación de nuevas perspectivas e ideas. Por ejemplo, al librarnos de un prejuicio muy arraigado, logramos abrir nuestra mente y adquirir nuevos conocimientos. Este proceso puede llegar a durar semanas o meses, ya que es una transición entre el lugar donde nos encontramos y el lugar donde queremos estar; entendiendo “lugar” como una metáfora de calidad de vida o situación profesional y personal, entre otros.
En esta disciplina participan dos agentes: el coach o entrenador y el coachee o persona que recibe el entrenamiento. La figura del coach es la de alguien que va a guiarte en tu camino a la obtención de los objetivos que te propongas. No se entrometerá ni realizará el trabajo por ti, sino que permanecerá como apoyo y mentor.
Vivimos en una sociedad frenética. De eso no cabe duda. El trabajo, la familia y los asuntos personales son actividades que nos roban la mayor parte de las horas del día. El poco rato libre que tenemos lo solemos invertir en perder tiempo en redes sociales. Y, por norma general, a medida que crecemos se reduce también nuestra vida social. ¿Porque ya no tenemos tiempo o porque ya no tenemos fuerzas?. Descuidamos nuestro bienestar y nos vemos expuestos a emociones que generan angustia y ansiedad. Y que pocas veces somos capaces de resolver.
El coaching, precisamente, se centra en la resolución de conflictos y la gestión del tiempo y los recursos como remedio al estrés. Asimismo, también pretende lograr un mayor control de las emociones y la reflexión sobre nuestras creencias y pensamientos. Por otra parte, también se anda a la caza de mejores hábitos de vida. Se sustenta sobre las siglas GROW: Goal, Reality, Options y Will. Objetivos, realidad, opciones y plan de acción.
¿Qué es el coaching deportivo?
El coaching deportivo es una de las variantes de esta disciplina. Consiste en un proceso mediante el cual, el coach deportivo, se encarga de potenciar las habilidades del deportista. La disciplina, la dedicación y el compromiso con nuestras metas son aspectos que se pueden trabajar en nuestro día a día. El objetivo es lograr que el rendimiento aumente y el desempeño mejore. Se pretende conseguir un equilibrio emocional para que la persona que recibe el entrenamiento se mantenga motivada y no abandone a la primera de cambio. Eso sí, esta persona debe colaborar y tener fuerza de voluntad, pues nadie se esforzará en su lugar.
¿Qué papel juega el coach deportivo?
El coach deportivo es quien ayuda a su coachee a lograr sus metas y objetivos, así como a progresar de forma constante. Más o menos como lo haría un entrenador personal, pero mucho más enfocado en modificar los pensamientos negativos. Cuando una persona sale en busca de un personal trainer suele ser porque se ha estancado en su entrenamiento y no sabe cómo modificar su rutina para estimular de nuevo su organismo. O, por otra parte, muchas personas se ven confrontadas ante su propia mente. “No puedo más”, “estoy cansado”, “mañana haré un poco más de ejercicio para compensar”. Estas son frases típicas usadas para prolongar una actividad que no queremos realizar. Esta falta de motivación es la que impide que logremos nuestros objetivos. Y también es la llamada de socorro que nos conduce a buscar alternativas.
El coach deportivo cuestiona los hábitos que su cliente ha seguido hasta el momento. Se cuestiona sus motivaciones, sus métodos de entrenamiento e, incluso, la dieta que sigue habitualmente. Todo esto se pone en duda para contemplar alternativas o buscar procedimientos más eficaces.
En el momento que el coach ha analizado al detalle la situación de la persona que requiere de su ayuda, se elabora un plan de acción. Este plan incluirá los elementos que hay que mejorar, así como un conjunto de técnicas enfocadas a alcanzar los objetivos planteados inicialmente.
¿Qué beneficios nos aporta el coach deportivo?
En el deporte es muy importante aprender a mantenernos motivados día tras día. Encontrar una excusa para no cumplir con nuestro entrenamiento es fácil, ¡pero que muy fácil!. “He tenido un día duro en el trabajo”, “está lloviendo”, “tengo que hacer recados”, y un infinito etcétera. Tal vez no en el 100% de los casos, tal vez no cada día. Pero son excusas. El siguiente paso es aceptarlo y querer cambiarlo. No lograremos nuestras metas si no nos esforzamos y trabajamos para progresar y mejorar nuestros puntos débiles.
Por norma general, un entrenador personal enseña cuestiones técnicas, no mentales. Mejora tu postura y la realización de los ejercicios, pero no suele tener la habilidad de motivar al atleta. Esto se debe a que la verdadera motivación es interna, y nace de nuestros pensamientos y nuestra fuerza de voluntad. Perseguir únicamente una medalla o un récord es una motivación externa. Esto se debe a que podemos llegar a trabajar duramente para lograrlo, pero una vez conseguido, lo dejamos atrás sin más. La motivación interna, en cambio, busca la mejora continua y el perfeccionamiento de todos los aspectos que influyen en la práctica del deporte.
El coach deportivo es esa persona que te ayudará a analizar la realidad de tu entorno, además de enseñarte las cuestiones técnicas. Te ayudará a discernir entre aquellos objetivos que puedes conseguir y aquellos que no. Además, elaborará un plan totalmente personalizado y adaptado a ti, para que no tengas excusa de ningún tipo.