¿Sabes a lo que se dedica un preparador físico? Parece obvio, pero muchas personas no saben hasta qué punto estos profesionales resultan de utilidad en distintas situaciones. Si te interesa formarte como entrenador personal especializado infórmate sobre el máster personal trainer. Si, por otro lado, estas pensando en contratar uno, sigue leyendo, esto también te interesa. Te presentamos a continuación, el trabajo de un personal trainer. Además, a lo largo del post iremos viendo en qué casos se puede contratar este profesional.
Índice de contenidos
¿Qué hace exactamente un preparador físico?
Seguro que puedes hacerte una ligera idea o, al menos, pensar “un preparador físico… ¡te prepara físicamente!”. Pero su labor es más compleja y lo vamos a ver aquí.
Ahora bien, ¿qué hace un preparador físico? Veamos cuáles son sus funciones:
- Diseño de planes de entrenamiento personalizados. Analizan las metas del deportista y desarrollan un plan que incluye ejercicios específicos para mejorar fuerza, resistencia, velocidad, flexibilidad y coordinación.
- Evaluación del rendimiento. Realizan pruebas físicas para identificar el nivel actual de las capacidades del atleta y monitorizar su progreso.
- Prevención y recuperación de lesiones. Trabajan en conjunto con fisioterapeutas y médicos deportivos para evitar lesiones y acelerar la recuperación.
- Supervisión del entrenamiento. Aseguran que los ejercicios se realicen correctamente para maximizar los beneficios y evitar daños.
- Asesoramiento nutricional y psicológico. Aunque no es su área principal, suelen coordinarse con nutricionistas y psicólogos para ofrecer un enfoque integral al rendimiento.
Cuando un cliente le contacta, este profesional realiza un diagnóstico de la situación inicial de la que se va a partir. Es imprescindible para realizar el plan de trabajo y, además, es la única manera de poder medir los resultados. Un buen profesional, además, analizará determinados aspectos del cliente. Los más importantes son su personalidad, sus fortalezas y debilidades y sus hábitos.
Con la información de partida (situación inicial y características del cliente) ya es posible elaborar un plan. El preparador diseñará un plan específico que atienda a los ámbitos que se quieran mejorar. Para ello, tendrá en cuenta lo que mejor se adapta a los gustos del cliente, sus necesidades y sus capacidades.
Durante todo el proceso, el cliente es acompañado por el preparador. Esto es fundamental por varios aspectos. Uno de los más importantes es que el profesional se asegura de que los ejercicios se ejecutan correctamente. Así, se evitan lesiones y se saca el máximo beneficio de la actividad. Por otra parte, el entrenador personal es un pilar fundamental del proceso de cambio porque motiva al cliente. Se trata de una labor aparentemente accesoria, pero que potencia los resultados al máximo.
¿Cuánto cobra un preparador físico?
El sueldo de un preparador físico puede variar considerablemente en función de su experiencia, ubicación geográfica, contrato o nivel de los deportistas con los que trabaja. Sin embargo, de manera general, un preparador físico que trabaja en centros deportivos puede cobrar entre 1.200 y 2.000 euros al mes.
Sin embargo, como hemos comentado, no se trata de una cantidad exacta. El nivel de especialización, su capacidad para trabajar con clubes deportivos que tengan ingresos superiores, si ejercen o no en una gran. ciudad… todos ellos son elementos a tener en cuenta para definir el sueldo del preparador físico.
Conoce qué es un entrenador personal y qué pros y contras plantea contar con el respaldo de este profesional.
¿Cuál es la diferencia entre un entrenador y un preparador?
El rol del entrenador es el del responsable general del equipo o deportista. Gestiona tanto aspectos técnicos como tácticos del deporte y se encarga de diseñar estrategias, analizar a los oponentes, motivar y liderar al equipo y tomar decisiones durante las competiciones.
En cambio, el preparador se enfoca exclusivamente en el rendimiento corporal. Aunque su trabajo complementa al del entrenador, su ámbito es más específico y técnico.
Otras diferencias entre un entrenador y un preparador físico son:
- Enfoque. Mientras el entrenador trabaja en la estrategia y técnica del deporte, el preparador se centra en el rendimiento físico.
- Colaboración. Ambos trabajan de manera conjunta para garantizar el éxito del atleta, pero sus responsabilidades son independientes.
- Conocimientos. El preparador tiene un conocimiento profundo de fisiología y biomecánica, mientras que el entrenador domina aspectos técnicas y tácticos.
Descubre cuáles son los requisitos para ser personal trainer.
¿Qué se estudia para ser preparador físico?
La formación de un preparador físico es clave para garantizar su competencia en el ámbito profesional. En este sentido, es posible estudiar cursos, certificaciones y másteres que otorguen las nociones necesarias para ser preparador físico. Estas incluyen áreas como la anatomía, las técnicas de motivación, el diseño de planes de entrenamiento y muchos otros.
Conoce cómo el máster en personal trainer que tenemos en Esneca Business School es perfecto para ti. Accede a una titulación avanzada y aprovecha la flexibilidad de estudio que plantea nuestro centro.
¿Cuándo se necesita un entrenador personal?
Hay determinados momentos de la vida en los que es necesario prepararse físicamente por alguna razón. Ya sean oposiciones, una mejora de nuestra salud o del aspecto físico u otras motivaciones particulares. Actualmente, los entrenadores personales se han popularizado y acuden a ellos distintos perfiles de clientes con necesidades muy diferenciadas. Sin embargo, nosotros seleccionamos algunas de las situaciones, motivaciones o objetivos más usuales. Fíjate en estos ejemplos:
Preparador físico para oposiciones
En determinadas oposiciones existen pruebas físicas que superar como parte de unas pruebas de oposiciones. Es el caso, por ejemplo, de las oposiciones para policía o algún cuerpo de seguridad, bomberos o agentes forestales. Si bien hay gente que se prepara por su cuenta, es muy común contar con preparadores especializados para poder aprobar. Estos tienen la experiencia de las pruebas que piden en los exámenes, por lo que el trabajo está muy enfocado a ellas. Además, gracias a la formación con la que cuentan, diseñan planes adaptados a cada perfil personal.
Algunas de las pruebas a aprobar con la ayuda de un entrenador físico especializado en ello son:
- Velocidad.
- Fuerza.
- Abdominales, flexiones y pruebas similares.
- Resistencia.
- Agilidad.
- Manualidad.
- Natación.
Entrenadores para acceder al INEF
Para acceder a una facultad de Ciencias de la Actividad Física y del Deporte es necesario realizar unas pruebas físicas. Con la formación de los preparadores físicos es más fácil asegurarse llegar a los objetivos que piden y acceder a los estudios. Un buen profesional especializado en estos casos preparará a su cliente en los diferentes retos o pruebas a superar. Generalmente, las pruebas suelen ser las siguientes:
- Carrera de obstáculos.
- La carrera de 50 metros.
- Carrera de 2000/1000 metros (suele hacerse esta distinción, donde los hombres harían 2000 metros y las mujeres, 1000).
- Lanzamiento de balón medicinal (5 kg para los hombres y 3 para las mujeres).
- Salto vertical.
- Natación.
- Test de flexión de tronco y caderas.
- Desplazamiento con balón en zig-zag.
Monitores personales para perder peso
En ocasiones, llega un momento de la vida en el que necesitamos hacer un cambio físico por cuestiones de salud. Lo normal sería comenzar a seguir una alimentación equilibrada ¿verdad? Seguro que conoces a alguien que, incluso, ha probado con dietas estrictas. En muchas ocasiones hay gente que cae en dietas de dudosa efectividad e incluso peligrosas. Otras veces se cuenta con el apoyo de un dietista-nutricionista, la opción más adecuada sin duda. Sin embargo, para algunos perfiles, el cambio o la regulación de hábitos alimenticios no es suficiente para estar sano, en forma y adelgazar.
Aquí es donde entran los preparadores físicos. Su labor en esta área es fundamental por varias razones. La principal es la de mejorar el estado físico y de salud del cliente. Su actuación contribuirá a que el individuo tenga objetivos realistas de mejora física. Con ellos, irá ayudando a la pérdida de peso saludable. Así, se perderá grasa y no músculo. Por otra parte, se fortalecerá, aumentará y definirá la musculatura existente. Además, el sistema cardiovascular se beneficiará, al realizar ejercicio de forma segura, adaptado al estado de salud del paciente.
No olvides que, en un proceso de este tipo, la motivación es fundamental. Así pues, encontrarás un fuerte apoyo en los siguientes elementos: contar con el acompañamiento de este profesional, unido a los avances que se van apreciando, junto con las endorfinas liberadas en el ejercicio. Sentirte genial te hará continuar avanzando.
Personal trainers para moldear tu imagen
No podemos negar que nuestra imagen es importante. Aunque no queramos, juzgamos a los demás por la primera impresión que nos da, y lo mismo sucede con nosotros. Sin embargo, hay casos que van más allá. Aquellos profesionales que necesitan tener una buena imagen para trabajar suelen contratar preparadores físicos. ¿Sabes quiénes suelen ser?
Seguro que has acertado si has pensado en modelos de algún tipo. Pero hay más: presentadores, reporteros, actores, cantantes y personajes famosos en general.
A menudo cuentan con un preparador físico para tener un aspecto visualmente sano y estético. No obstante, también se preparan para trabajos que exigen cierta forma y resistencia.
Entrenamiento por otros objetivos
Hay algunas profesiones que, aunque a simple vista no parezcan precisar un fondo deportivo, sí que lo hacen. Es el caso por ejemplo de los cantantes. Piensa en un cantante que, a la vez, tiene que correr y bailar por el escenario. O que necesita reforzar los músculo de su torso para mejorar su respiración. También podría necesitar un plan de entreno especializado un actor que se va a incorporar a una película con escenas de acción.
El rango de personas que puede precisar el trabajo de un entrenador es tan amplio que puede acercarse incluso a otros perfiles. Por ejemplo, una persona sedentaria, un oficinista o una persona lesionada. Todos ellos pueden acudir a un monitor que les diseñe planes de entrenamiento específicos para sus casos. Unos para reforzar su musculatura, otros para relajar y reeducar su postura y otros para recuperarse de una lesión.
Es en estos casos cuando el cliente se beneficia del programa personalizado que ha creado el preparador físico, así como de su acompañamiento.