La reputación online se ha convertido en una de las características más buscadas por las marcas. Se trata de la opinión o del sentimiento que los usuarios tienen sobre tu empresa. Y es algo sobre lo que puedes influir y, hasta cierto punto, controlar. Queremos aprovechar aquí para explicarte todo sobre ella. Además, te recordamos que puedes estudiar el máster en marketing digital a distancia para convertirte en un profesional capacitado en este ámbito.
Índice de contenidos
¿Qué se entiende por reputación online?
La reputación es una cuestión de prestigio en internet, de lo que tu marca representa y de cómo se presenta ante el mundo. En este sentido, va a determinar profundamente el destino comercial de tu empresa, y precisamente por eso es fundamental cuidarla y prestarle atención.
¿Por qué la reputación online es importante?
Para saber por qué hay que cuidarla, primero hay que entender en qué cosas te puede influir, te explicamos las principales:
- El peso de la investigación. Cada día los consumidores y los usuarios están más educados en diferentes modelos de compra. La investigación previa de los productos y de las marcas tiene un enorme peso en la actualidad. Esto significa que una mala reputación implica una bajada en el volumen de ventas.
- Relación con el posicionamiento. Las buenas reputaciones digitales suelen estar situadas en los primeros puestos de resultados de los buscadores. Y, como bien sabrás, si no estás en la primera página de resultados es como si prácticamente no estuvieras.
- Tiene relación con la fidelización de clientes. La reputación se sostiene sobre la opinión positiva de clientes satisfechos con tus servicios. Clientes que, por lo general, terminan volviendo a contratarte. Por lo tanto, invertir en reputación es también invertir en fidelización.
- También es una cuestión de confianza. Si quieres ampliar tu público o seguir sumando clientes, necesitas una buena reputación online. Ya hemos visto que te puede ayudar en los buscadores para atraer nuevos clientes.
Consejos para mejorar la reputación online de una empresa
La reputación online no es un estatus que se alcanza una vez y del que, posteriormente, puedes olvidarte. Se trata, en todo caso, de un proceso infinito sobre el que hay que trabajar a diario a través de una estrategia de brand marketing, la cual siempre se debe de mejorar. Siempre vas a poder alcanzar una reputación algo mayor si te lo propones.
Estos serían los principales focos de trabajo.
1. Un buen sitio web
Se trata de la matriz de tu plan digital. El punto de venta o de reunión por el que tendrán que pasar tus potenciales clientes. Por ello, es necesario que tenga un aspecto cuidado, profesional y que sea muy fácil de manejar.
Piensa en la experiencia del usuario y en la usabilidad del portal y no te olvides de añadir con mesura tus elementos corporativos para ser reconocible.
2. Dale un mayor peso a tu contenido
Vas a tener que esforzarte en ofrecer un contenido original, de calidad y fresco. Además, tienes que pensarlo como la puerta que te va a permitir aumentar tu reputación. Es decir, en función de los temas que trates, de la forma de abordarlos o de tantos otros motivos vas a construirte un tipo de reputación u otra.
Así, si quieres potenciar tu parte seria o tu parte profesional, puedes apostar por un contenido mucho más comprometido. Si en cambio quieres presentarte como una marca joven, puedes ofrecer datos más útiles e incluso curiosos.
3. Servicios de atención al cliente diseñados
El objetivo final siempre tiene que ser el mismo: resolver las dudas en el menor número de pasos posible. Cuando un cliente tiene preguntas, lo mejor que puede recibir es una jerarquía clara de funciones y un sistema que sea resolutivo. Al fin y al cabo, este tipo de servicios son los que van a aumentar, y mucho, tu reputación de forma directa.
Si hay algún perfil que ya no estés utilizando, elimínalo. Esto tiene que ser prioritario. Da una mala imagen tener cuentas fantasma que has tenido que abandonar, ya que da sensación de dejadez y de desinterés por tu parte. Lo que hace necesario cuidar muy bien tu estrategia en redes sociales. Y es que el secreto aquí estaría en la planificación.
5. Conecta con los clientes
No solo a nivel comercial o profesional, también a nivel humano. Tienes que ser capaz de vincular las emociones de tus consumidores con tus productos. O, más bien, aquellas emociones que quieres que se relacionen. Puedes querer despertar simpatía, agrado, empatía, etc. Dependerá todo de la estrategia general que sigas, pero tener en cuenta los sentimientos es esencial para despertar simpatías.
6. Sé un experto de tu sector
Cuando realices contenidos trata de hablar de tu propio sector con experiencia. Es decir: preséntate como una marca que maneja (y mucho) el entorno en el que se mueve. Esto es esencial ya que te permite generar una confianza automática en los usuarios que reciban tu contenido.
7. Sé sincero
Ninguna empresa es perfecta, y el público está harto del falso velo de perfección con el que se cubren muchas de ellas. Por lo tanto, lo mejor siempre es que seas totalmente sincero con tus intereses, con tus medios y con los resultados que vayas obteniendo. Si te equivocas en algo, ármate de humildad y reconócelo, pidiendo disculpas.
8. Monitoriza tu reputación
Puedes encontrar bastantes herramientas online que te ayudarán a saber qué reputación de marca tienes. Mirar los comentarios, el porcentaje de likes y demás son algunas otras opciones bastante clásicas. En cualquier caso, trabajar con la reputación de una marca no es fácil, por eso es importante mantenerte formado. Por ello, en Esneca contamos con diferentes titulaciones en marketing que necesitas y que te permitirán desarrollar los conocimientos necesarios para ser un profesional del sector. De esta manera te será posible ayudar a las marcas y empresas a generar una mayor confianza entre sus clientes potenciales.
En conclusión, la reputación online es fundamental de cara a aumentar las ventas de tu empresa. Y también para labrarte un futuro sólido y bien construido. Estos son solo algunos de los puntos de trabajo, pero en general es una tarea más profunda. Solo los expertos pueden tener un conocimiento realmente efectivo sobre cómo trabajar la reputación.