Criminal y delincuente, ¿conoces la diferencia? Generalmente, se utilizan ambos términos indistintamente y lo cierto es que son parecidos. Sin embargo, cada uno de ellos tiene su propia definición y características que los diferencian.
En el artículo de hoy profundizamos en estos conceptos, en sus diferencias y en cómo se clasifican los delincuentes. ¿Te gustaría descubrir todos los detalles sobre la delincuencia y la criminalidad? ¡Sigue leyendo!
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Índice de contenidos
¿Qué diferencia hay entre criminal y delincuente?
Para comprender qué diferencia hay entre criminal y delincuente, es necesario entender qué es y qué comporta cada acción por separado.
- Delincuencia: este concepto describe actos ilegales que van en contra de las normas sociales o legales, sin especificar necesariamente la gravedad del delito. La delincuencia abarca desde infracciones menores hasta delitos más violentos.
- Criminalidad: se refiere al conjunto de delitos o actividades delictivas dentro de una sociedad o área geográfica específica. Esta incluye factores delictivos, tasas de criminalidad y la aplicación de la ley para prevenir la actividad delictiva.
Por lo tanto, la principal diferencia entre criminal y delincuente recae sobre la naturaleza de los actos delictivos. En este sentido, la palabra “criminal” tiende a asociarse con delitos serios y violentos. En cambio, si nos fijamos en cómo se define un delincuente, observamos que abarca un rango más amplio de conductas ilícitas, también aquellas de menor gravedad. Por ejemplo, se le llama delincuente a alguien que ha robado en una tienda o ha tenido actos vandálicos. Por el contrario, el criminal es quien ha cometido un homicidio o ha traficado drogas.
¿Por qué una persona se convierte en un criminal?
Mucha gente se cuestiona si un criminal nace o se hace. Lo cierto es que existen muchas teorías que intentan explicar este fenómeno. Algunos factores que se han identificado como posibles contribuyentes son de carácter socioeconómico, familiares, psicológicos, educacionales o sociales. Es decir, factores externos que influyen en la mentalidad de la persona y que, seguramente, le llevan a cometer los delitos.
¿Cómo se clasifican los delincuentes?
Algunas personas se preguntan qué tipos de criminales existen, pues bien, Cesare Lombroso, considerado el padre de la criminología, usa la misma clasificación para ambos conceptos.
Así pues, según qué características tiene un delincuente, la clasificación es la siguiente:
Criminal nato
Lombroso considera que es posible reconocer a un criminal analizando sus características corporales. En este sentido, fijándose en los ojos de la persona, se manifiestan ciertos rasgos de inferioridad orgánica y psíquica. Asimismo, también se caracteriza por una personalidad insensible e impulsiva.
Delincuente loco moral
Este tipo de delincuentes son astutos, vanidosos y egoístas, aunque a veces altruistas y capaces de justificar la mayoría de sus delitos. Generalmente, se les encuentra encerrados en cárceles, pero raramente en centros de atención psicológica.
Delincuente epiléptico
Los delincuentes epilépticos son considerados los más peligrosos por el alto grado de violencia que demuestran, aunque son capaces de calmarse brevemente como si nada hubiera pasado. Se caracterizan por su vagancia y por su actitud destructiva y vanidosa.
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Delincuente loco
Este delincuente es el que ha cometido un crimen y, posteriormente, enloquece, ya sea en prisión u en cualquier lugar. Suele clasificarse en tres tipos:
- El alcohólico: la persona se embriaga y comete el delito.
- El histérico: se caracteriza por mentir y presenta tendencia al erotismo.
- El mattoide: suele delinquir por impulso.
Delincuente pasional
Estas personas, de entre 20 y 30 años, destacan por ser muy afectuosas, algo que les provoca sentir conmoción una vez cometido el delito. Son honestas y debido a estas características, suelen confesar el delito.
Delincuente ocasional
Los delincuentes ocasionales se dividen en tres subgrupos:
- Los pseudo-criminales: suelen cometer delitos menores de manera involuntaria, generalmente en defensa propia.
- Los criminaloides: cometen el delito según las circunstancias y, debido a su empatía, suelen juntarse con personas que empeoran su situación cuando entra a prisión.
- Los delincuentes profesionales: no han recibido educación, pero sí tienen muchos conocimientos criminológicos. Podría decirse que son delincuentes desde su infancia. Generalmente, la pobreza y la mala vida les ha llevado a cometer crímenes, hasta convertirse en delincuentes profesionales.
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