El informe psicológico infantil es un documento escrito que reúne el procedimiento y diagnóstico del psicólogo. El objetivo es comunicar los resultados de una valoración, algo que suele ser demandado por profesionales como neurólogos, pediatras, docentes, padres o tutores. ¿Quieres saber cómo redactarlo? Te contamos qué es lo que necesitas saber para elaborarlo y te ofrecemos un ejemplo de informe psicológico infantil para que puedas orientarte.
Índice de contenidos
¿Qué es un informe psicológico infantil?
El informe psicológico infantil es una herramienta básica para evaluar y comprender el desarrollo emocional, cognitivo y conductual de niños y niñas. Los profesionales de la psicología, a través de este documento, recopilan información detallada sobre diversos aspectos de la vida del menor para poder identificar posibles dificultades. El objetivo es establecer un diagnóstico adecuado para poder diseñar una intervención efectiva.
Para poder establecer un diagnóstico, el psicólogo infantil se basa en una serie de métodos de evaluación:
- Entrevistas con el niño y su familia.
- Observaciones directas.
- Pruebas psicométricas.
- Cuestionarios estandarizados.
Cómo se redacta un informe psicológico infantil
Este documento se suele estructurar de forma clara y ordenada. Debe seguir un formato estándar que facilite su comprensión y que posibilite a otros profesionales (docentes, tutores, pediatras, etc.) la lectura del mismo. Para redactar un informe psicológico infantil se siguen las siguientes pautas o estructura:
Partes y estructura
Con el objetivo de facilitar la lectura y la comprensión del informe, se sigue un orden en su estructura de acuerdo con estas partes:
- Información de identificación. Incluye datos básicos del niño o niña evaluado, como el nombre, edad, fecha de nacimiento, nivel educativo y contexto familiar.
- Motivo de consulta. Se describe brevemente el motivo que llevó a realizar la evaluación psicológica, ya sea a solicitud de los padres, educadores u otros profesionales.
- Antecedentes. Se recopila información relevante sobre la historia médica, psicológica y familiar del niño o niña, así como cualquier evento significativo que pueda haber influido en su desarrollo.
- Procedimiento de evaluación. En esta sección se detallan las técnicas y las herramientas que se han utilizado durante la evaluación, como entrevistas, pruebas, observaciones…
- Resultados. Llegados a este punto del informe, se presentan los hallazgos más relevantes. Se incluyen los resultados de las pruebas, las observaciones clínicas y el análisis de la información recopilada.
- Diagnóstico. Si es pertinente, se incluye un diagnóstico psicológico basado en los criterios establecidos en los manuales diagnósticos internacionales, como el DSM-5 o la CIE-10.
- Conclusiones y recomendaciones. Se resume las conclusiones derivadas de la evaluación y ofrece recomendaciones específicas para abordar las necesidades identificadas, ya sea a nivel educativo, terapéutico, familiar o social.
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Ejemplo de informe psicológico infantil
He aquí un ejemplo de informe psicológico infantil que puede servirte de orientación:
Información de identificación:
Nombre: Ana García.
Edad: 8 años.
Fecha de nacimiento: 15/06/2026.
Nivel educativo: 3º de primaria.
Contexto familiar: Vive con sus padres y dos hermanos menores.
Motivo de consulta:
La evaluación psicológica fue solicitada por la escuela debido a dificultades en el rendimiento académico y problemas de comportamiento en el aula.
Antecedentes:
Ana es la mayor de tres hermanos y vive en un entorno familiar estable. No se reportan antecedentes médicos relevantes. Sin embargo, los padres refieren dificultades emocionales desde el nacimiento de su hermano menos, hace dos años.
Procedimiento de evaluación:
Se realizaron entrevistas con los padres y la maestra de Ana, así como observaciones en el aula. Además, se administraron pruebas psicométricas para evaluar su coeficiente intelectual, habilidades académicas y funcionamiento emocional.
Resultados:
Ana presenta un coeficiente intelectual dentro del rango promedio, pero muestra dificultades significativas en lectura y escritura. En cuanto al comportamiento, se observa la impulsividad, dificultad para mantener la atención y conflictos interpersonales en el aula.
Diagnóstico:
Se establece un diagnóstico provisional de Trastorno del Aprendizaje no Especificado y Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH), que requiere una evaluación más exhaustiva por parte de un especialista.
Conclusiones:
Se recomienda una evaluación multidisciplinaria para confirmar el diagnóstico y diseñar un plan de intervención individualizado que incluya apoyo educativo, terapia psicológica y orientación a los padres y educadores.
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