Seguramente ya sabes que el deporte genera endorfinas. Practicar actividad física no solo mejora la salud, sino que tiene un impacto significativo en el bienestar mental. Una de las principales razones de ello es la producción de las hormonas de la felicidad. A lo largo de este blog te contamos cómo funciona y los beneficios que tiene el deporte para la salud mental.
Índice de contenidos
¿Qué hormonas de la felicidad genera el ejercicio?
El deporte genera endorfinas, pero también desencadena la liberación de varias otras hormonas y neurotransmisores que contribuyen a la sensación de bienestar. Estas son las más importantes:
- Endorfinas. Actúan como analgésicos naturales y mejoran el estado de ánimo produciendo una sensación de euforia y reducción del dolor.
- Serotonina. Regula el estado de ánimo, el apetito y el sueño. Su efecto es la mejora del humor y su contribución a la sensación de felicidad y bienestar.
- Dopamina. Está involucrada en el sistema de recompensa y motivación del cerebro y aumenta la motivación y la satisfacción, especialmente después de alcanzar una meta.
- Noradrenalina. Su función es aumentar el enfoque y la atención, y su presencia permite mejorar la concentración y reducir el estrés.
- Anandamida. A menudo se la llama la “molécula de la dicha”, y se une a los receptores cannabinoides del cerebro con el efecto de proporcionar una sensación de calma y felicidad.
El deporte genera endorfinas: ¿cuánto duran?
La liberación de endorfinas durante el ejercicio es responsable de la euforia conocida como “runner’s high” o subidón del corredor. La duración de las endorfinas que produce el deporte puede variar.
Las endorfinas suelen liberarse inmediatamente durante la actividad física intensa y pueden generar una sensación de bienestar que dura todo el ejercicio y unos minutos después. A corto plazo, esta sensación puede durar entre una y dos horas.
A medio plazo, los beneficios psicológicos pueden alargarse más horas y, cuando nos ponemos a medir su impacto a largo plazo, cabe destacar que la práctica regular de ejercicio permite experimentar mejoras persistentes en el estado de ánimo y una reducción general de la ansiedad y la depresión.
Beneficios psicológicos del deporte
Debido a que el deporte genera endorfinas, no es de extrañar que comporte múltiples beneficios para la salud mental:
- Reduce el estrés. El ejercicio reduce los niveles de hormonas asociadas al estrés, como el cortisol, lo que ayuda a manejar situaciones estresantes con mayor calma y claridad.
- Mejora el estado de ánimo. A través de la liberación de endorfinas y serotonina, proporciona una sensación general de felicidad y bienestar.
- Mejora de la autoestima. Lograr objetivos de ejercicio y ver cómo mejora el aspecto corporal contribuye a aumentar la autoestima, mejorar la confianza y cómo nos vemos a nosotros mismos.
- Reduce la ansiedad y depresión. La actividad física actúa como un antidepresivo natural, lo que permite disminuir los síntomas de la ansiedad y la depresión.
- Mejora la función cognitiva. La práctica de ejercicio regular aumenta el flujo senguíneo al cerebro y libera factores neurotróficos. Mejora la memoria, la concentración y la agudeza mental.
- Mejora la calidad del sueño. El ejercicio activa el mecanismo de regulación de los ritmos circadianos y reducción del estrés, lo que facilita un sueño más profundo y reparador.
Cómo hacer deporte para generar endorfinas
Para maximizar la liberación de endorfinas y otros neurotransmisores beneficiosos es importante tener en cuenta algunos aspectos del ejercicio. Por ejemplo, es recomendable que la intensidad del ejercicio sea de moderada a alta: correr, nadar, bicicleta o entrenamiento de alta intensidad serían las opciones indicadas.
Respecto a la duración del ejercicio, esta debe ser de por lo menos 30 minutos para asegurar una liberación significativa de endorfinas. Un tiempo suficiente de ejercicio asegura una mayor producción de hormonas de la felicidad, y algo semejante ocurre con la frecuencia del ejercicio. Lo recomendable es practicarlo entre 3 y 5 veces por semana.
Combinar diferentes tipos de ejercicio y practicarlo al aire libre son dos elementos que contribuyen a mejorar el estado de ánimo. La exposición a la luz solar y el contacto con la naturaleza potencian los efectos positivos del ejercicio sobre el estado de ánimo.
Finalmente, diseñar un plan de entrenamiento adecuado a las capacidades de cada uno y fijar unas metas realistas es fundamental para poder mantener la motivación durante el proceso. Y nadie mejor para ello que un entrenador personal: adquiere sus conocimientos y habilidades con el programa formativo avanzado que planteamos desde Esneca Business School.
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