La rueda de la vida en coaching es una herramienta básica para el desarrollo personal. Se utiliza para evaluar y equilibrar las diferentes áreas de la vida de una persona, puesto que su componente visual la convierte en realmente práctica para identificar áreas de satisfacción y áreas que necesitan atención. Veamos en qué consiste este ejercicio y cómo aplicarlo correctamente.
Índice de contenidos
¿Qué es la rueda de la vida en coaching?
La rueda de la vida en coaching es una representación gráfica que divide la vida en diferentes áreas clave. Incluye la salud, las finanzas, la carrera, las relaciones, el desarrollo personal… Es muy sencilla de personalizar según cada persona para adaptarlo a aquello que le da valor.
Esta herramienta es utilizada por coaches para ayudar a sus clientes a evaluar su nivel de satisfacción en cada una de estas áreas. La rueda suele estar dividida en segmentos, cada uno representando un área específica de la vida, y se utiliza en una escala del 1 al 10 para que la persona valore su grado de satisfacción.
¿Cuál es el objetivo de la rueda de la vida?
El objetivo de la rueda de la vida es proporcionar una visión clara y completa del equilibrio vital de una persona. Los individuos que la usan pueden evaluar si se sienten satisfechos o no con diferentes áreas de su vida de una forma visual y tangible, algo que facilita la identificación de aquellas áreas que necesitan mejora.
A través de esta herramienta, se facilita la creación de metas realistas, el desarrollo de un plan de acción específico y el seguimiento del progreso. Esto se debe a que sirve como herramienta para medir el progreso a lo largo del tiempo.
¿Qué preguntas se hacen en la rueda de la vida?
A rasgos generales, los aspectos que evalúa la rueda de la vida son el trabajo, el dinero, la salud, los amigos y familia, el amor, el desarrollo personal, el ocio y el hogar. Para cada uno de estos elementos es importante realizarse preguntas introspectivas para evaluar el nivel de satisfacción en esta área.
Estas son las preguntas que se hacen en la rueda de la vida que te ayudarán a identificar los ámbitos de mejora:
- ¿Cómo te sientes en cada área de tu vida actualmente?
- ¿Qué áreas de tu vida te causa más insatisfacción y por qué?
- ¿Qué área de tu vida consideras que está más equilibrada?
También puedes hacerte preguntas para identificar desafíos, establecer nuevas metas y desarrollar un plan de acción:
- ¿Cuáles son los principales desafíos que enfrentas en las áreas menos equilibradas?
- ¿Qué oportunidades ves para mejorar en estas áreas?
- ¿Cómo se vería un 10 perfecto en cada una de estas áreas?
- ¿Qué acciones concretas puedes tomar en las próximas semanas o meses?
¿Cómo se realiza la rueda de la vida?
Puedes realizar la rueda de la vida en 6 sencillos pasos. Lo que evalúa la rueda de la vida dependerá de cada persona. Puede que haya individuos que quieran incluir la espiritualidad, por ejemplo.
Dibuja la rueda
Se dibuja un círculo grande en una hoja de papel y se divide en secciones, como los gajos de una naranja. Cada sección representa un área diferente de la vida. Las áreas incluyen salud, carrera, finanzas, relaciones, desarrollo personal, diversión, contribución y entorno.
Etiquetar las áreas
Cada segmento del círculo se etiqueta con una de las áreas clave de la vida. Es importante que estas áreas sean relevantes y significativas para la persona que realiza el ejercicio. Por ello, si en la rueda no se ha indicado la espiritualidad, pero el individuo lo considera un aspecto importante en su manera de ver la vida, se añade.
Evaluar cada área
La satisfacción actual de la persona con cada uno de los ámbitos de la rueda de la vida se pone a prueba. Se utiliza una escala del 1 al 10, donde 1 indica muy insatisfecho y 10 indica completamente satisfecho. Esta valoración se marca en los segmentos de la rueda, a fin de crear una representación visual del equilibrio actual.
Conectar los puntos
Cuando se ha hecho la evaluación de cada una de las áreas, se conectan los puntos dentro de cada segmento para formar una rueda. Esto proporciona una imagen clara de las áreas de la vida que están desequilibradas y aquellas que están bien atendidas.
Reflexionar sobre los resultados
Una vez se tiene la imagen de la rueda, la persona reflexiona acerca de su forma y las áreas que necesitan atención. Esta reflexión puede incluir preguntas sobre por qué ciertas áreas están menos satisfechas y qué se puede hacer para mejorarlas y sentirse plenamente a gusto con ellas.
Establecer metas y acciones
Basándote en los resultados, se establecen metas concretas para mejorar. Una vez hecho, se desarrolla un plan de acción con pasos concretos para alcanzar estas metas. Y aquí es dónde entra en juego el papel del coach: una vez la persona ha detectado qué es lo que necesita mejorar, el coaching le ayuda a marcarse objetivos realistas y establecer pautas y estrategias para lograrlos.
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