La comunicación nos permite expresar emociones, intercambiar información y coordinar acciones. Pero no sólo transmitimos datos y hechos, sino que también construimos relaciones y nos adaptamos al entorno social. Por ello, entender los objetivos de la comunicación es básico a la hora de manejar las habilidades sociales y lograr una interacción más efectiva tanto en lo personal como en lo profesional. ¿Nos acompañas para conocer cuáles son los propósitos de la comunicación con ejemplos?
Índice de contenidos
¿Cuáles son los 4 objetivos de la comunicación y ejemplos?
Los objetivos de la comunicación pueden variar según el contexto y el propósito de la interacción. En términos generales, podemos identificar varios objetivos clave que subyacen a la mayoría de los actos comunicativos:
- Informar.
- Persuadir.
- Motivar.
- Mantener relaciones.
¡Veamos cuáles son los 4 propósitos de la comunicación y ejemplos prácticos para entender mejor en qué consisten!
Informar
Seguramente sea el propósito de la comunicación más básico y fundamental. Implica transmitir datos, hechos y conocimientos de manera clara y precisa, y es indispensable para desenvolverse bien en muchos contextos: la educación, el trabajo, la vida cotidiana…
Este es un ejemplo de comunicación informativa: en el contexto educativo, los profesores informan a los estudiantes sobre diversos temas y conceptos, proporcionando datos de relevancia y compartiendo conocimientos precisos sobre un tema.
Otro ejemplo de este objetivo de la comunicación lo encontramos en el área empresarial. A través de la transmisión de datos, se informa acerca del progreso de la empresa, cambios en las políticas y cualquier otro aspecto relevante para los empleados.
Persuadir
La persuasión es un objetivo de la comunicación que busca influir en las opiniones, actitudes o comportamientos de los demás. Este objetivo es común en la publicidad, el marketing, la política y cualquier área en la que sea necesario convencer a alguien para adoptar un punto de vista o tomar una acción específica.
Un ejemplo de persuasión lo encontramos en la publicidad. Los anuncios están diseñados para persuadir a los consumidores de comprar productos o servicios. Más o menos, lo mismo ocurre con un discurso político: el representante intenta convencer a los votantes de que es el mejor candidato y busca influir en las opiniones de las personas.
Te puede interesar: Las técnicas de comunicación asertiva que debes conocer.
Motivar
Cuando hablamos de motivar, hablamos de estimular a las personas a tomar una acción o lograr un objetivo concreto. Este propósito de la comunicación es común en el liderazgo, en la gestión de equipos y en el desarrollo personal.
Por ejemplo, un líder empresarial puede dar un discurso a su equipo antes de un proyecto para motivarles y energizarles, alentándoles a trabajar juntos y esforzarse. Otro ejemplo de motivación es el que emplea el coaching personal. Esta disciplina se encarga de motivar a un cliente a adoptar hábitos saludables, proporcionándole palabras de aliento y estrategias específicas para mantenerse enfocado.
Relacionarse
La comunicación también tiene el objetivo de establecer y mantener relaciones. A través de la comunicación, las personas podemos construir conexiones significativas con los demás y mantenerlas en el tiempo. En las relaciones personales, la comunicación permite tener una conversación honesta y abierta entre amigos o parejas, expresar sentimientos, escuchar activamente y mostrar empatía, por ejemplo.
Otro ejemplo es el networking profesional. La habilidad de establecer y mantener relaciones incluye asistir a eventos, intercambiar tarjetas de presentación y participar en conversaciones significativas con colegas. Todo ello puede contribuir a la creación de una red de contactos fuerte y útil para el empresario.
¿Te gustaría saber más? ¡Trabaja tus habilidades comunicativas con el postgrado en coaching personal y profesional! Eleva tu trayectoria al siguiente nivel con la formación 100% online y flexible de Esneca Business School.