¿Has oído hablar del coach deportivo? Si eres deportista profesional o practicas deporte de forma habitual ya lo conoces o, como mínimo, te suena. Pero, ¿qué sabes de esta profesión? Hoy nos adentraremos en el coaching deportivo, una profesión que está en auge. Muchos deportistas y apasionados del deporte encuentran en él una salida profesional de futuro. Si a ti también te gusta el mundo del deporte y quieres emprender una carrera profesional, estudia el máster en coach deportivo de Esneca. Te abrirá las puertas de un sector en auge y con alta demanda.
Índice de contenidos
¿Qué es el coaching deportivo?
El coaching deportivo es una disciplina de desarrollo personal que ayuda a deportistas y atletas a conseguir sus metas deportivas. Su objetivo principal es guiar al deportista para que encuentre la motivación y la fuerza para superar los obstáculos y maximizar su potencial. Sin embargo, no solo se debe a los deportistas ya avanzados en sus disciplinas o rutinas. También está enfocado a todas aquellas personas que quieren iniciarse en el ejercicio. Sea cual sea su objetivo, el coaching tiene respuesta para ellos.
Así, por ejemplo, puede recurrir a él una persona que quiere empezar a realizar deporte por prescripción médica. Pueden incluso recurrir al coach de deporte todas aquellas personas que quieran mejorar su estado físico o de salud. ¿Quieres saber más? ¡Sigamos indagando!
Funciones de un coach deportivo
El proceso de coaching es la parte psicológica del entrenamiento del deportista. El coach deportivo guía y acompaña al profesional del deporte para que este consiga la motivación necesaria para lograr sus objetivos. Es el deportista el que, con ayuda de su coach, consigue sacar de su interior la implicación y la voluntad. Cualidades básicas para afrontar y superar sus puntos débiles y potenciar los fuertes.
Entre las múltiples funciones del coach deportivo, podemos destacar las siguientes:
Fomentar la autoestima y la motivación
Las técnicas de coaching trabajan para que el deportista ahonde en su “yo interior”. De este modo, a través del autoconocimiento, se puede trabajar la autoestima y la seguridad en uno mismo y seguir trabajando. Por otro lado, el deportista toma conciencia de quién es y de sus fortalezas y debilidades. No es malo asumir que cada uno tenemos nuestros puntos débiles. Incluso al contrario, tenerlos claros y asumirlos es un escalón que nos puede impulsar a la mejora continua.
Asimismo, esto ayuda a que el deportista pueda encontrar la motivación y evitar las frustraciones. Cabe recordar que las metas deseadas siempre se consiguen mejor si van acompañadas de una pizca de motivación, otra de ambición y otra de realismo.
Ayudar a superar los miedos del deportista
Esta función, deriva de la anterior. El autoconocimiento permite identificar aquello que provoca miedos o dudas. Una vez se tiene consciencia de lo que provoca el bloqueo, el coach deportivo enseña a gestionarlo para que se convierta en algo que sume.
Favorecer la comunicación
La relación con el resto de compañeros, entrenadores, técnicos y personas involucradas en su vida también influye en el deportista. El coach deportivo le ayuda a entender e interpretar las comunicaciones entre ellos. Así como a identificar y resolver las situaciones en que lo transmitido no se ha comprendido de manera adecuada.
Enseñar a planificar
Para lograr las metas, el coach deportivo ayuda al deportista a diseñar un plan estratégico, planificando las acciones y los periodos de tiempo de forma realista. Este proceso guía al atleta en la consecución de los objetivos y le evita frustraciones innecesarias.
Desarrollar las capacidades de los atletas
El coaching permite conocerse a si mismo, conocer las habilidades y debilidades propias y aprender a gestionar las emociones. Esto fomenta el desarrollo profesional y personal a través de un aumento de los retos y del talento del deportista.
Asesorar a equipos deportivos
Los coach deportivos también gestionan equipos. En este caso, una de sus funciones es crear equipos y desarrollar una plantilla comprometida con el grupo y con sus metas. Un equipo motivado que trabaje de forma conjunta para conseguir los objetivos planificados.
Cuando se trabaja a nivel de equipo, el coach deportivo aplica sus procesos y técnicas tanto en el deportista como en los entrenadores y técnicos para integrar la preparación mental y emocional en su metodología de entrenamiento.
Qué estudiar para ser coach deportivo
Cada vez es más la concienciación que tenemos sobre la estabilidad mental y emocional para poder progresar en cualquier ámbito. Y es por ello que el coaching vive, actualmente, en un constante auge.
Uno de los tipos de coaching que está teniendo más demanda es el enfocado al deporte. Y es que no es extraño ver fracasar a un gran atleta en situaciones en que, normalmente por sus capacidades físicas, no tendría que haber fallado. Pero, la mente y el estado emocional influyen mucho en las habilidades de cada uno, sobre todo en situaciones de mucha presión o estrés como son las competiciones. Es ahí donde entra en acción el coach deportivo, guiando y asesorando como si se tratara de un entrenador psicológico.
Formarse como coach deportivo es una salida de futuro asegurada, pues una formación como el máster online en coaching deportivo de Esneca dota de los conocimientos necesarios para asesorar a deportistas. Además, si fuiste deportista, tus experiencias anteriores te ayudarán a empatizar con tus clientes y entenderles mejor.
Si, por otro lado, eres entrenador o preparador físico, añadir a tu currículum esta especialización incrementará su valor y te permitirá abordar los entrenamientos desde las dos perspectivas. Aplicando tus conocimientos como coach deportivo, establecerás un proceso de mejora integral que beneficiará notablemente el desarrollo de tus clientes.