En la actualidad, tenemos mucha información y cuesta distinguir en cuál podemos confiar. Resulta más importante que nunca tratar de focalizarse en los hechos y eliminar interpretaciones malintencionadas. Y, por eso, es clave entender qué es la objetividad. En este blog te ayudaremos a diferenciar entre textos objetivos y subjetivos con ejemplos claros de cada uno.
Estudia periodismo digital y aprende cómo escribir textos objetivos basados en hechos. Contribuye a un periodismo objetivo, responsable y de calidad con el postgrado que te ofrece Esneca Business School.
Índice de contenidos
¿Qué es la objetividad?
Comprender qué es la objetividad puede ser difícil para algunas personas, aunque a priori parezca evidente. La definición de objetividad es a de la cualidad que hace que un texto, descripción o elemento esté basado en hechos y sea imparcial. En otras palabras, la capacidad de presentar información de manera neutra, sin permitir que las emociones, prejuicios o interpretaciones personales influyan en la presentación de los datos.
Es un principio fundamental en el ámbito científico y periodístico, donde la precisión y la veracidad de la información son cruciales. Para ser objetivo, se necesita que los informantes se centren en hechos verificables y eviten cualquier influencia personal que pueda distorsionar la realidad.
La objetividad busca la verdad y la exactitud. Busca representar la realidad tal como es, sin el uso de adornos ni interpretaciones más propias de la literatura. Esto se consigue a través de la aplicación de métodos rigurosos y sistemáticos de recolección y análisis de datos, construyendo así lo que se conoce como información objetiva.
¿Qué es información objetiva?
La información objetiva es aquella que se presenta de manera imparcial, basada en hechos verificables y sin la influencia de opiniones o interpretaciones personales. Esta clase de información es crucial en la ciencia, el periodismo, la educación y el derecho, donde la precisión y la veracidad son esenciales.
Así, las 4 características de la información objetiva son:
- Verificabilidad. Los datos y afirmaciones pueden comprobarse con pruebas independientes.
- Precisión. La información es exacta y detallada, evitando generalizaciones o vaguedades.
- Imparcialidad. Se presenta sin sesgo, manteniendo una perspectiva neutral.
- Claridad. Es fácilmente comprensible y accesible para el público, evitando el uso de lenguaje ambiguo o técnico innecesario.
¿Qué es un texto objetivo?
Un texto objetivo es aquel que presenta la información de manera clara, precisa y sin sesgo, de acuerdo con la información objetiva. Son textos que se centran en hechos y datos verificables, evitan las opiniones personales, las interpretaciones o las emociones.
Diferencias entre textos objetivos y subjetivos
Los textos objetivos y subjetivos se diferencian principalmente en la forma en que se presenta la información y en la influencia de la perspectiva del autor. Mientras que los textos objetivos buscan la imparcialidad y la precisión, los textos subjetivos reflejan las opiniones, emociones y experiencias personales del autor.
Los textos objetivos se caracterizan por:
- Basados en hechos. Se centran en datos y hechos verificables.
- Imparciales. Presentan la información de manera neutral.
- Lenguaje preciso. Utilizan un lenguaje claro y específico.
- Estructura lógica. Están organizados de manera coherente y sistemática.
En cambio, los textos subjetivos se caracterizan por:
- Basados en opiniones. Reflejan las emociones y experiencias personales del autor.
- Perspectiva personal. Presentan la información desde una perspectiva personal.
- Lenguaje emotivo. Utilizan un lenguaje que puede ser más emotivo y persuasivo.
- Estructura menos formal. Pueden tener una estructura más flexible y menos sistemática.
Descripción objetiva y subjetiva: ejemplos
Para ilustrarlo mejor, veámoslo con ejemplos de descripción objetiva y subjetiva:
Ejemplo de descripción objetiva:
“El parque central de la ciudad tiene una extensión de 10 hectáreas y está ubicado entre las calles Principal y Segunda. Cuenta con una variedad de instalaciones, incluyendo una cancha de baloncesto, un área de juegos para niños y un estanque. Los árboles principales en el parque son robles y pinos, y hay una gran cantidad de bancos distribuidos a lo largo de los senderos pavimentados.”
En esta descripción objetiva, la información es precisa y basada en hechos verificables. No hay opiniones o interpretaciones personales, solo datos específicos sobre el parque.
Ejemplo de descripción subjetiva:
“El parque central de la ciudad es un lugar encantados y sereno, perfecto para relajarse y disfrutar de la naturaleza. Sus amplios espacios verdes y la sombra de los majestuosos robles y pinos crean un ambiente tranquilo. La cancha de baloncesto siempre está llena de vida, y el área de juegos para niños resuena con risas y alegría. Pasear por sus senderos pavimentados y sentarse en uno de los muchos bancos es una experiencia realmente placentera.”
En esta descripción subjetiva, la información incluye interpretaciones y emociones personales. El autor expresa sus sentimientos y opiniones sobre el parque, describiéndolo como encantador y sereno, y utilizando un lenguaje emotivo.
Aprender a utilizar la información verificable para redactar textos objetivos y relevantes es una de las metas del periodismo, y su reto actual. Hacer frente a la avalancha informativa, captar la atención del ciudadano y seguir manteniendo la objetividad es un reto de auténtico equilibrista, pero posible.
¡Estudia periodismo digital y aprende cómo contribuir a una información veraz y de calidad en la sociedad 2.0! Inscríbete ya.