El testamento abierto es un documento legal mediante el cual una persona expresa de manera clara y explícita su voluntad sobre la distribución de sus bienes, derechos y obligaciones después de su fallecimiento. Se hace en presencia de un notario y, en algunos casos, de testigos. ¿Quieres saber más acerca de su significado y validez? Te contamos más a continuación.
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Índice de contenidos
¿Qué es el testamento abierto y qué significa?
El testamento abierto es un acto jurídico formal mediante el cual una persona, denominada testador, declara ante un notario público cuáles son sus deseos respecto a la disposición de sus bienes tras su muerte. Este tipo de testamento se caracteriza por ser explícito y por realizarse bajo la supervisión de un profesional legal que asesora durante el proceso.
Ahora bien, respecto a qué significa el testamento abierto, este término hace referencia al hecho de que el contenido del testamento es conocido por el notario y, en algunos casos, por testigos, si la ley lo requiere. Esto garantiza que el documento sea claro, que cumpla con los requisitos legales y que no exista ambigüedad en su interpretación.
Además, no se limita a cuestiones patrimoniales. También puede incluir disposiciones personales, como el nombramiento de tutores legales para hijos menores o personas dependientes, instrucciones sobre la gestión de deudas e incluso expresiones de última voluntad en relación con ceremonias funerarias.
¿Cuál es su validez?
La validez del testamento abierto depende del cumplimiento de ciertos requisitos legales establecidos por el marco normativo del país en el que se otorga. En términos generales, este tipo de testamento es válido si:
- Se otorga ante un notario público. Asegura que el documento cumple con las formalidades legales y que el testador actúa con plena capacidad y voluntad.
- El testador tiene capacidad legal. Esto implica que la persona debe ser mayor de edad y encontrarse en pleno uso de sus facultades mentales al momento de redactar el testamento.
- Se sigue el procedimiento establecido. Lo cual incluye la declaración oral del testador, la redacción del documento por parte del notario y la posterior firma de todas las partes involucradas.
- Se realiza sin coacción ni engaño. El testamento debe reflejar exclusivamente la voluntad del testador, sin influencia indebida de terceros.
Cuando estos requisitos se cumplen, el testamento adquiere plena validez jurídica. En caso de disputas, su carácter público y su elaboración ante un notario facilitan su defensa y ejecución en tribunales.
Ejemplos de testamento abierto
Para ilustrar cómo puede redactarse, aquí te presentamos dos ejemplos. El primer ejemplo de testamento abierto es patrimonial:
“Yo, Juan Pérez García, mayor de edad, declaro en este testamento mi voluntad de que mis bienes se distribuyan de la siguiente manera: vivienda principal ubicada en la calle Principal Nº 123 será para mi hija Ana Pérez López; me vehículo será para mi hijo Carlos Pérez López; y el resto de mis bienes, incluidos los ahorros en mi cuenta bancaria, serán divididos en partes iguales entre ambos. Asimismo, nombro a mi hermano, Luis Pérez García, como albacea de mi patrimonio.”
Este otro caso, en cambio, se trata de un ejemplo de testamento abierto personal:
“Yo, María González Fernández, mayor de edad, dispongo en este testamento que, tras mi fallecimiento, mi tutor legal para la gestión de mis asuntos será mi sobrino, Alberto González. También quiero dejar claro que deseo que mi funeral sea de carácter privado y que no se celebren actos religiosos. En cuanto a mis bienes, designo como única heredera a mi hija, Sofía González”.
¿Cuál es la diferencia entre un testamento abierto y uno cerrado?
Aunque ambos tipos de testamentos buscan garantizar que se cumpla la voluntad del testador, existen diferencias entre un testamento abierto y uno cerrado. Veámoslo.
Grado de confidencialidad
En el abierto, el contenido es conocido por el notario y, en algunos casos, por los testigos. Por otro lado, cuando el testamento está cerrado, el testador redacta el documento por su cuenta y lo entrega al notario en un sobre sellado, manteniendo su contenido en secreto hasta su apertura tras el fallecimiento.
Intervención notarial
El notario tiene un papel activo en el testamento abierto, puesto que redacta el documento según las instrucciones del testador y asegurándose de que cumple con las leyes. Pero, cuando vemos qué pasa con el testamento cerrado, en este caso el notario solo certifica la entrega del sobre sellado, sin involucrarse en el contenido del mismo.
Facilidad de interpretación
El abierto es más fácil de interpretar porque el notario garantiza que las disposiciones sean claras y conforme a la legislación vigente. El cerrado, pero, puede dar lugar ambigüedades o problemas legales si el contenido no está bien redactado o no cumple con las normativas.
Accesibilidad
Como el abierto no requiere que el testador redacte el documento previamente, es mucho más común y sencillo de realizar. En cambio, el cerrado se utiliza en casos excepcionales donde el testador desea mantener su contenido en estricta confidencialidad.
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